INTRODUCCIÓN.
Hablar de competencias
en los momentos actuales, ya no solo hace referencia al alumno, recuerdo lo
escrito en otro ensayo que elabore y reafirmo con ello, que el
ser competente se dirige no solo
a los alumnos sino a los docentes, ambos actores del proceso educativo deben saber conocer,
hacer, ser y convivir.
DESARROLLO
La búsqueda
de una educación de calidad que garantice resultados, ha ocasionado
resistencia al practicar nuevos enfoques
en el proceso enseñanza – aprendizaje; investigaciones sobre la educación en
distintos países concluye que en Finlandia se apoyo una educación en base a las habilidades
para la vida; tal como se publico
en el diario de la jornada, esta forma de educación debía generar el desarrollo personal del individuo, el ejercicio de valores para enfrentar
dificultades, garantizando así una vida con éxito
Considerar que el
ser humano debe alcanzar el
éxito en el entorno en
el cual se desenvuelve, condujo
en años anteriores a centrar
al individuo en una educación
integral y con ello el desarrollo de todas sus potencialidades.
En la
actualidad una educación por
competencias, se enfoca al aprendizaje que debe resultar significativo
para quién aprende, considerar estilos
de aprendizaje y las llamadas inteligencias múltiples o inteligencia
emocional que contribuyen y favorecen el desarrollo
de las habilidades, destrezas y actitudes
necesarias para el
desarrollo del proceso enseñanza aprendizaje.
Laura
Frade hace referencia a
“competeré”, que quiere decir
pertenecer, comprometerse con algo para
salir victorioso; en estos
términos la educación por competencias
favorece el compromiso personal,
el saber hacer y ser para alcanzar
el éxito.
De la misma forma el docente
debe ser guía e intermediario entre los conocimientos y
forma en la que los alumnos pueden apropiarse de ellos, de
tal forma, tiene la tarea de innovar
su práctica, adecuar la metodología a la diversidad de
talentos, ser empático, ser ajustar contenidos (recordemos que son muy extensos)
y hacer uso de las Tics; es
decir, buscara la profesionalización
para el desarrollo de sus habilidades,
destrezas y actitudes.
CONCLUSIÓN
Muchas han sido las reformas generadas en nuestro país sobre educación, sin embargo, se ha olvidado lo esencial: nuestro
contexto cultural; necesidades sociales, económicas, falta de estructura en
comunidades indígenas, pobreza extrema
esto y más ha quedado olvidado para dar paso a los caprichos políticos de nuestros gobernantes en turno.
Los planes de
estudio ¿quienes deberían real-izarlos? los maestros que caminan
largas jornadas para llegar a las
escuelas, los que conviven a diario durante
siete o más horas con los alumnos, los que asesoran
o regularizan fuera del tiempo de trabajo, los que consuelan, los que
sugieren a los padres de familia, o ¿los que están detrás de un escritorio? Con
nuestros miles de estudiantes en escuelas sin recursos, en el sistema público ¿estarán los hijos de nuestro peor enemigo, el gobierno?.
MTRA. MARGARITA PEREZ REYES